alopecia femenina

La alopecia femenina crece en España y sube la demanda de injertos

La pérdida de pelo en nuestro país no es un asunto solamente masculino. Es muy probable que te sorprenda el dato de que al menos el 40% de las mujeres españolas padecen algún tipo de problema en términos de alopecia femenina. La variable androgenética de la patología, al igual que en los casos masculinos, es la que más impacta en el género femenino. ¿Qué explicaciones tienen estos datos? ¿Qué soluciones existen?

 

La explicación tiene varias aristas. Conviene señalar que en el caso de la pérdida de pelo androgenética, la causa es hormonal. A partir de ahí se puede desgranar en herencia genética o en cambios hormonales a priori anómalos. Sin embargo, ¿Qué razones hay para que se propicien estas alteraciones? Por un lado, el estilo de vida de la mujer española ha cambiado mucho en las últimas décadas. En los últimos cuarenta años, su incorporación laboral masiva y los hábitos de alimentación han provocado que, en algunos casos, experimenten transformaciones hormonales que antes se observaban mayoritariamente en hombres. En este punto, también convendría señalar que asuntos como la ansiedad o el estrés se han incorporado con fuerza en la lista de causas que favorezcan la alopecia femenina.

Tratamientos para solventarlo

Ante la creciente demanda de soluciones a la pérdida de cabello por parte de la población femenina, existen métodos para poner remedio a este problema. El injerto capilar es la principal y más efectiva medida para hacer frente a la alopecia femenina. De hecho, uno de cada tres implantes realizados en nuestro país a través de las técnicas FUE, Non Shaven FUE y FUSS tienen como pacientes a mujeres.

 

Esta realidad, desmonta claramente el mito de que la pérdida de cabello es propia de los hombres. La alopecia femenina se extiende de la misma manera y, paulatinamente, con más igualdad. Es importante cuidar la alimentación,  el descanso y demás factores relacionados con el mantenimiento de la salud para proteger la vitalidad del cabello. Sin embargo, a medida que las generaciones avanzan, los factores hormonales y genéticos también siguen introduciéndose en los procesos de la alopecia sin discriminar géneros.