calvicie y genética

Calvicie y genética, ¿Qué se sabe actualmente de ellas?

Se ha hablado y escrito muchísimo acerca de este tema en las últimas décadas. De hecho, incluso se han llegado a dar por sentadas algunas afirmaciones no están estudiadas del todo. O al menos no se ha llegado a una conclusión final, de forma íntegra. Calvicie y genética, un tema recurrente que a menudo sirve de explicación y también de consuelo para quien lo sufre. Sin embargo, entrar en detalle en esta cuestión significa también averiguar uno de los grandes misterios que rodean a esta patología. ¿Qué se sabe a estas alturas? ¿Son ciertas todas las creencias que se han extendido? ¿Hasta dónde llega esta famosa relación? Sin duda, son preguntas que la ciencia intenta resolver con cada vez más persistencia.

 

Mitos desmitificados

En este sentido, la creencia popular o lo que creía conocerse es la implicación decisiva del abuelo materno en estos casos. El hecho de que el abuelo materno padeciese alopecia parecía ser un indicativo casi decisivo en que un individuo también la pudiese desarrollar. Esta teoría se formulaba en parte a la importancia del cromosoma X. Sin embargo, este gen no es el único que entra en juego sobre todo si hablamos de alopecia androgenética. Muchos son los genes que intervienen para producir esta patología además de los componentes ambientales y personales. Por ello, el hecho de que tu abuelo materno padeciera alopecia, no quiere decir que tú debas padecerla. Más bien, el hecho de que en tu familia haya más miembros con este problema, facultará en mayor medida a que tú también lo tengas. Pero no existe un miembro de la familia clave a nivel genético.

Calvicie y genética, ¿Qué se conoce?

Las líneas de investigación por las cuáles científicos de todo el mundo están encontrando respuestas explican que los andrógenos circulantes son protagonistas principales a la hora de causar la pérdida de cabello. Ellos se relacionan con los receptores de los folículos dando lugar a transformaciones y cambios que hacen que el folículo se debilite o disminuya. Este fenómeno trae consigo la pérdida de grosor del cabello hasta su desaparición.

 

Los estudios que relacionan calvicie y genética continúan avanzando y aportando respuestas a la medicina capilar. Sin embargo, en estos momentos lo más aconsejable para tratar de solucionar la pérdida de cabello es ponerse en manos expertas para determinar qué tratamiento es el adecuado.